El transporte público en Junín: de los festejos por la vuelta a las preguntas por el funcionamiento

  • Por Redacción Agenda 365 -
  • Publicado el 07/04/2019

Junín necesitaba el transporte público. Se trata de un derecho de los vecinos.
Si la ciudad que alcanzó a tener cuatro líneas de colectivos en la década de 1980 era increíble que, con un crecimiento demográfico normal, no tuviera ninguna a las puertas del 2020.
Dejaron de usarse durante la gestión de Abel Miguel, pese a sus intenciones no pudieron ser reestablecidos en los años de Mario Meoni al frente del Municipio y volvieron en el último año del (¿primer?) mandato de Pablo Petrecca. 
La promesa de Petrecca de instalar el transporte público, recordada por la oposición con originales campañas de visibilización, fue finalmente cumplida, y la población en su conjunto celebró su vuelta. Hasta aquí, una historia feliz.

 

 

Sin embargo, el siguiente capítulo comenzó complicado.
Desde Agenda 365 ya se había publicado un video que mostraba el techo de los coches oxidados y despintados, lo cual marcaban sus años de servicio.  http://bit.ly/2TCTxe1  En el primer día, uno de los colectivos chocó a un auto a las puertas de la obra social Osecac, frente a la plaza 25 de Mayo. Más tarde, en Pastor Bauman y Ramón Hernández, otro tuvo un desperfecto y tuvo que ser reparado, quedando un rato estacionado en el medio de la calle. http://bit.ly/2Uk2IoY.

 

 

El sábado por la mañana, ocurrió el hecho más grave. Una de las unidades chocó una garita y por este accidente una mujer resultó herida y trasladada al Hospital Internazonal. http://bit.ly/2UFkOB6 Además, hubo numerosos reclamos de los vecinos sobre el incumplimiento del horario de la frecuencia de los colectivos.

 

 

Es esperable que después de tanto tiempo sin funcionar, haya inconvenientes en el corto plazo. Pero surgen algunas dudas lógicas. ¿Estaban los choferes de los micros lo suficientemente capacitados para salir a la calle, más teniendo en cuenta un tránsito difícil como el juninense? ¿El lanzamiento fue apurado por cuestiones electorales y aún faltaban ajustes? ¿Las dársenas y los garitas construidas con tanto tiempo de anticipación previeron qué coches se iban a usar? ¿Cuánto tiempo podrán ser utilizados estos colectivos?

Celebrar la vuelta del transporte público no se contradice con realizarse estas preguntas, lícitas y necesarias, luego de la primera semana de funcionamiento.