Alberto presentó el Plan Nacional de Lecturas

  • Publicado el 31/12/2019

El gobierno presentó el Plan Nacional de Lecturas, destinado a llegar a 10 millones de niños y adolescentes de los niveles primario y secundario. En un acto en el Museo Casa Rosada (ex Museo del Bicentenario), el ministro de Educación, Nicolás Trotta, y la coordinadora del Programa, Natalia Porta López, dieron a conocer los ejes de este relanzamiento junto al presidente Alberto Fernández. Los acompañaron los ministros de Cultura, Tristán Bauer, y Justicia, Marcela Losardo, además de los y las escritores, ilustradores, editores y gráficos que llenaron la sala. El Plan será recuperado con algunas novedades. Una es que la distribución de libros estará apoyada por una red federal de mediadores, para acercar la lectura como un acto cotidiano. Y que habrá un consejo asesor encargado de definir los libros a editar. Además, el Estado va a desarrollar contenidos en formatos digitales, en línea con los nuevos hábitos de consumo cultural.

El programa apunta a que la lectura literaria, recreativa (y no solo la de los libros de texto) vuelva a tener un espacio en el aula. Ya se está trabajando en una primera edición de "180 lecturas sugeridas para 180 días de clase". Habrá además líneas de acción para el trabajo de docentes y bibliotecarios. 

El lanzamiento fue parte del paquete de medidas tomadas por el Ministerio de Educación nacional para reasumir políticas educativas. El Plan de Lecturas -como la paritaria docente, el Conectar Igualdad y los programas socioeducativos- fue desmantelado en la gestión de Cambiemos, que llegó a tirar en los contenedores de basura del Palacio Pizzurno centenares de libros del programa. Los planes de lectura quedaron supeditados así a la inversión que cada provincia pudiera destinarles; las bibliotecas escolares se vieron en dificultades para prestar textos a los alumnos, que  dejaron de recibir literatura para llevar a casa. En los archivos queda la foto de un grupo de personas rebuscando en los tachos, intentando rescatar los libros desechados por el Ministerio. En la web, de la misma manera, quedan blogs creados para mantener accesibles los recursos que Educación produjo entre 2003 y 2015. Años en los que el estado nacional llegó a distribuir gratuitamente 40 millones de ejemplares libros. 

El presidente Alberto Fernández habló en el lanzamiento del plan. Se definió como "un lector analógico": está acostumbrado "a dar vuelta la página de papel", a subrayar y hacer anotaciones en los márgenes.  Sin embargo, calificó el uso de la pantalla como “inevitable”. Por esto, señaló, el Estado va a ocuparse de poner los contenidos en soportes digitales. En esa dirección, el ministro de Educación, Nicolás Trotta, adelantó que el proyecto es avanzar hacia la multiplataforma, generando aplicaciones e insumos para leer. 

El programa va a tener un Consejo Asesor que será el encargado de definir las colecciones, los textos y las obras que formen parte del Plan. Otras iniciativas anunciadas son una campaña en los medios (“Una que leamos todos”) para promover la lectura en familia, una encuesta de lectura -desde 2015 se dejó de hacer- y la creación del concurso "Yo sueño, yo escribo”, para la publicación de cuentos y poemas.