InformeAgenda365 // ¿Cuáles son los municipios que gestionaron más viviendas para sus vecinos en la sección? 

  • Publicado el 23/05/2019

El déficit habitacional que sufre el país es una de las tantas materias pendientes que tiene el Estado para con el pueblo argentino, no ha podido hasta el momento llevar soluciones a las clases más vulnerables: la casa propia es una utopía para millones de argentinos.

Un informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos demuestran que en la actualidad uno de cada tres hogares tiene problemas de viviendas: cuatro millones, de los cuales 1,5 millones son la cantidad de viviendas que se necesitan construir, y el resto, casas ya construidas pero que tienen problemas de calidad, falta de servicios básicos o hacinamiento.

¿Pero que sucede en Junín con esta problemática? ¿Cuál es el rol del Instituto de la ivienda en Junín y su articulación con el Gobierno local?  Lo cierto es que las familias que no cuentan con acceso al crédito hipotecario son cada vez menos, y el Estado no termina cubriendo una necesidad básica.

En Junín el Intendente de Cambiemos Pablo Petrecca anunció en el mes de septiembre del año 2016 un plan provincial donde se iban a construir 50 viviendas en un terreno del barrio La Celeste. 

Las 50 viviendas estaban contempladas en un convenio que el Concejo Deliberante aprobó el 29 de septiembre de 2016. El documento adhería al Convenio Solidaridad Habitacional con los Municipios, del Instituto Provincial de la Vivienda; pero en el medio pasaron cosas.

Dos años después, en agosto de 2018 el municipio licitó 25 viviendas que habían sido aprobadas en 2016. Hasta el momento no se construyeron.

La licitación a la que llamó el Intendente de Junín tiene un presupuesto oficial de 27 millones de pesos. En tanto, el proyecto original contempla  50 casas a un monto de 37 millones de pesos. En el medio cambiaron las variables económicas y la promesa de campaña se devaluó.

A los problemas conocidos, donde las 50 viviendas se redujeron a 26, la empresa que ganó la licitación para la construcción de la misma denunció irregularidades y demoras en los cobros por lo que abandonó la ciudad antes de iniciada la obra. También habían aclarado que “faltaban firmas y papeles que dependían del Municipio y del Instituto de Viviendas de la Provincia de Buenos Aires”.

                    Indec estima que en 2018, en la Argentina viven 44,5 millones personas que conforman 13,3 millones de hogares.

La crisis habitacional que vive el país es preocupante: en Junín la construcción avanza en forma monopólica y de calidad, los edificios que  van vistiendo la ciudad son construcciones del nuevo siglo.

De créditos que aportó el Estado para paliar la situación en Junín fueron alrededor de mil las viviendas que se construyeron con el crédito PRO.CRE.AR. Lo demás es privado.

Lejos están los que puedan comprar un lote, teniendo en cuenta la irregularidad económica,  créditos atados a la inflación: una bicicleta financiera que favorece a pocos.

 “Primero se licitaron las 26 viviendas con 26 millones de pesos y como el presupuesto era mucho más elevado se volvió a licitar por un monto mayor, ganó una empresa de Buenos Aires que llegó a Junín, tomó a cuatro compañeros para armar el obrador y limpiar el lote y cuando estaban por empezar se fueron”, había manifestado en diálogo con Agenda 365 Eduardo Diotti, Secretario General de la UOCRA Junín.

Los argumentos de la empresa apuntaron a la falta de claridad y de pagos por parte del Municipio de Junín y del Instituto de la Vivienda.

Los rostros de la crisis habitacional:  Acampe frente al Municipio con violento desalojo

Durante el mes de abril y algunos días de mayo la Plaza principal de la ciudad sirvió como escenario de protestas de más de 50 familias que reclamaron por terrenos para la construcción de viviendas: el mensaje dirigido al Intendente de la ciudad y a la Oficina de Desarrollo Social apuntaba a un “diálogo” para llevar adelante gestiones de compra de lotes. “No queremos que nos regalen nada, queremos pagarlos nosotros”, manifestaron los “vecinos sin techo” que acamparon durante 43 días frente al municipio hasta ser desalojados de manera violenta por la policía y en horas de la madrugada.

La mayoría de las familias que reclaman los “terrenos” o “planes federales de viviendas” están hoy desempleados, viven de changas y no alcanzan a cubrir las necesidades básicas: la falta de vivienda. Los terrenos que reclaman este grupo de vecinos de Junín, están ubicados en cercanías del Velódromo de la ciudad, y a pocas cuadras del barrio el Progreso.

Son familias con niños y niñas que hoy se encuentran en situación de calle y vulnerabilidad ante la falta de respuesta por parte del gobierno municipal.

“La única respuesta por parte del municipio es que le da a los vecinos por cuatro meses la mitad de un alquiler, lo que equivale a $1500 por mes, o sino les da materiales por única vez, que deben usar en las casas donde están ahora que son prestadas, porque quedaron en la calle" contó María Eugenia Núñez, Secretaria Gremial de la CTA-A de Junín.

“Había diez compañeros durmiendo, de pronto comenzaron a escuchar ruido y se encontraron rodeados de policías. Muchos compañeros pudieron irse tranquilamente, pero dos quedaron detenidos. A una chica la liberaron inmediatamente pero le dijeron que le iba a llegar una citación por conexión clandestina de luz, porque en uno de los postes de luz había un enchufe que usamos sin saber que era clandestino”, agregó Nuñez con respecto al episodio ocurrido en la madrugada del 3 de mayo.

¿Qué sucede en otros municipios?

En el Municipio de Alberti, a cargo de Germán Lago (PJ) luego de afrontar la construcción de las viviendas paralizadas del programa Techo Digno, el Municipio anuncio durante abril del corriente año la entrega de 4 de las 8 viviendas.

En Bragado, tierras del Intendente Gatica  por  Cambiemos , luego de fallidas reuniones, el Municipio firmó en mayo de 2017 un convenio con el instituto de la Vivienda que le permitía construir casas con precios de agosto de 2016 y resultaron 50 hogares. Las variables económicas y los presupuestos que se triplicaron en algunos casos por la suba del dólar paralizaron la obra.

Recorriendo la cuarta sección,  en Carlos Casares, municipio que conduce  Torchio (PJ) se entregaron 108 terrenos a familias que construyeron sus propias casas. En abril de 2018 confirmaron la construcción de viviendas para empleados municipales y policías.

El marzo de 2019, en Carlos Tejedor,  el Intendente Raúl Sala –Cambiemos- anunció el avance de la obra de tres viviendas sociales que se construyen sobre el predio del Hogar de Ancianos San José en Carlos Tejedor.

Así mismo en la vecina ciudad de Chacabuco, Víctor Aiola –Intendente por Cambiemos- hizo entrega de 25 viviendas.

En el mismo sentido en General Pinto, el 30 de marzo de 2019 el jefe comunal pintense, Alexis Guerrera dirigente massista  retomó la construcción de 36 viviendas.  Las reiteradas gestiones hicieron destrabar la situación y antes de fin de año estarían en condiciones de poder ser entregadas

Por otra parte la ciudad de Lincoln, encabezado por su Intendente Salvador  Serenal-Cambiemos- gestionó el Plan de Autoconstrucción de Viviendas que se comenzó a ejecutar en 2018 con fondos municipales.

 

Fuente: Agenda 365, Idec, Instituto de la Vivienda Provincia de Buenos Aires