Paso Bajo a Nivel: La obra inconclusa que dejó Junín partida en dos
- Publicado el 04/06/2025
Lo que parecía ser una solución largamente esperada para una ciudad atravesada por las vías del tren terminó en una postal de abandono. Junín, en el noroeste de la provincia de Buenos Aires, cumplió más de 700 días con su principal arteria, la avenida Rivadavia, completamente clausurada.
La obra del paso bajo nivel, proyectada para mejorar la conectividad e impulsar a una zona comercial vital en la ciudad, se encuentra paralizada desde diciembre de 2023, tras el inicio del mandato presidencial de Javier Milei y la implementación de su política de “obra pública cero”. Aunque como comentó César Dardano, comerciante, su historia ya tiene más de 15 años de idas y vueltas.
"Acá en la zona ya cerraron 14 locales y uno de esos comercios fue mío y tengo otro tambaleando, producto de la parálisis de la obra que derivó en la falta de movimiento de gente. Siempre se quiso hacer otro paso a nivel porque son pocos los que hay, pero ahora los que quedan se embotellan. La ciudad directamente quedó dividida, partida en dos como si fueran dos lugares distintos”, lamenta Dardano, comerciante de indumentaria de Junín, en diálogo con Buenos Aires/12.
Él es uno de los vecinos que encabeza un reclamo judicial para reactivar la obra y que piden por un impulso mayor desde el municipio.
El impacto sobre los servicios esenciales, el tejido social y económico de la ciudad cada resulta cada vez más complejo de sortear para los vecinos. “Es una locura, tenemos bomberos de un lado, Policía del otro, tenemos el hospital de un lado y las clínicas están del otro”, continúa Dardano.
Los testimonios se multiplican. Los comerciantes hablan de un desplome de ventas superior al 80 por ciento, persianas bajas y un movimiento de personas casi nulo. Julián, uno de ellos, afirmó en una entrevista con C5N: “Acá nos partió al medio. Junín está dividido al medio. La gente de acá, para pasar de aquel lado, tiene que hacer cinco cuadras por un lado o diez para otro para poder pasar. Lo del otro lado lo mismo y se vende muy poco. Nos perjudicó muchísimo”.
Frente a esta situación, los vecinos que quieren circular de un lado al otro deben dirigirse hacia los cruces alternativos de Alberdi o Primera Junta que en las horas picos pasan a ser cuellos de botellas para los vehículos. “Tenés que armarte de paciencia para cruzar”, asegura Dardano.
Otro vecino, Juan Manuel, sintetiza: “Los puentes sirven para unir y cuando no los haces, los partís. Con el problema económico estamos pasando todo. La cuadra está totalmente desierta. Lo difícil es levantarse a las mañanas tempranas sabiendo que no vas a ganar plata”.
“Inicialmente, en 2009, hubo un proyecto de un vecino que era brillante, donde se tenía en cuenta que la obra no sólo iba a tener un paso para vehículos, sino también una suerte de centro comercial, ya que Rivadavia es una calle muy importante, llena de comercios de un lado y del otro. Digo de un lado y del otro porque la ciudad está partida al medio por el ferrocarril”, explica Dardano.
Las idas y vueltas de una obra sin fin
Después de muchos años de pedidos vecinales, la obra había sido adjudicada a Sabavisa S.A. en marzo de 2021 y comenzó formalmente en junio de 2023, tras el montaje de un puente peatonal que se inauguró en abril de ese mismo año. El cierre total al tránsito en Rivadavia fue ejecutado el 14 de junio de 2023. A partir de entonces, la ciudad quedó partida. “Nos dijeron que no se iba a cortar el tránsito, que iba a estar todo bien. Eso nos comentaron desde el municipio en su momento y al día siguiente se cortó el tránsito para siempre porque con Milei ya no apareció ningún operario”, recuerda Dardano.
Frente a esta situación, el caso alcanzó el plano judicial. Ante la falta de fuerza en los reclamos por parte de las autoridades municipales actuales, según señalan los vecinos, fueron los propios comerciantes quienes presentaron un recurso de amparo el 23 de octubre de 2024, con el patrocinio del abogado Jerónimo Torres, y el respaldo legal de la Sociedad de Comercio e Industria local a través del letrado Pablo Rasuk y el de la Federación de Sociedades de Fomento. El juez federal Héctor Plou dio lugar a la demanda y ordenó a ADIFSE (la entidad estatal a cargo) que resolviera en 30 días si continuaba o no con el proyecto original de 2021, y que, en caso de decidir la reapertura del paso, lo hiciera en un plazo no mayor a 60 días. La resolución fue apelada y ahora el expediente espera sentencia firme en la Cámara Federal.
Los comerciantes no sólo reclamaron judicialmente, también denunciaron que el proyecto original de la obra fue recortado en más de un 30 por ciento sin que se haya llamado a una nueva licitación, como correspondería. “Una vez que gana (la licitación), los comerciantes nos enteramos de cómo iba a ser el nuevo proyecto, empezamos a gritar porque de dónde empezaba a dónde terminaba, era una locura el desnivel que iba a tener. Como achicaron la obra, debería haber ido nuevamente a licitación”, denuncia Dardano.
La obra tenía un avance estimado del 15 por ciento cuando fue interrumpida. Desde entonces, se presentaron múltiples alternativas para retomar los trabajos. Una de ellas contempla la creación de un Fondo Fiduciario que permitiría al Municipio emitir deuda respaldada por coparticipación, a través del Banco Provincia. La propuesta, presentada por concejales de Unión por la Patria, quedó en comisión al cierre de esta edición.
Mientras tanto desde el gobierno municipal, encabezado por Pablo Petrecca, se solicitó el cambio de destino de un préstamo de 1.000 millones de pesos del Banco Provincia originalmente pensado para la compra de maquinaria, a fin de destinarlo a reabrir el paso. A eso se sumarían otros 800 millones contemplados en el Presupuesto 2025. También se pidió al gobierno nacional el traspaso de la obra y de terrenos ferroviarios ociosos para financiar la continuidad del proyecto. Tampoco hubo respuestas por parte del Estado Nacional, según manifiestan desde la comuna local a los vecinos.
“El intendente mira para el otro lado”, lanza Dardano, quien apunta a la falta de compromiso político con el drama que atraviesa la ciudad. “El intendente está en campaña. Yo soy muy crítico del intendente, porque para mí es quien vos votás cada cuatro años y le das la llave de tu ciudad al intendente, para que vele por todos los juninenses, por los 110.000 que somos. Y realmente nos dio la espalda”.
El comerciante resalta lo que define como el absurdo administrativo de haber licitado sobre una vía que no se usa desde fines de los noventa, y habla del costo final proyectado de la obra: “En un principio valía 5 millones de dólares allá por el 2009 porque la mano de obra, la maquinaria, el cemento y el hierro se mide en dólares. Hoy, desde el municipio nos dicen que taparla y volver al paso a nivel costaría 1,8 millones y terminar la nueva obra demandaría entre 3 y 4 millones".
La bronca se mezcla con el cansancio y la decepción. “Yo la verdad que fui uno de los pioneros, junto con Walter, otro vecino, de estar a los gritos con esto”, relata Dardano, quien llegó a obtener una ayuda económica inicial de 200 mil pesos, que luego se duplicó para apenas diez comercios. Pero sostiene que fue insuficiente. “Estamos acá fundiéndonos, realmente no entiendo qué esperan”.
Desde el comerciante que ve su calle vacía, hasta el ciudadano que teme por su seguridad si ocurre una emergencia en hora pico. Desde quien recuerda que la obra iba a terminar en febrero de 2025, hasta quien ya ni siquiera tiene negocio que sostener, todos ellos esperan por una pronta solución.
“Después de tantos años, ya pasó mucha agua bajo el puente y realmente es vergonzoso”, cierra Dardano.
Nota Página 12-Por Juan Manuel Meza