UNNOBA: Se aprobó el protocolo para el retorno a clases presenciales

El Consejo Superior de la UNNOBA aprobó el Protocolo General para el retorno de las actividades académicas presenciales, así como los correspondientes protocolos específicos.

La sesión de este órgano de gobierno de la UNNOBA se realizó con la participación (presencial y remota) de los representantes de los distintos claustros (profesores, auxiliares, no docentes y estudiantes).

“(El protocolo) tiene como propósito establecer pautas generales para promover un ordenamiento en las actividades presenciales y la organización de prioridades de carácter académico y pedagógico en el marco del calendario académico 2020 y hasta tanto las condiciones sanitarias requieran adecuaciones de esta naturaleza”, especifica el informe del Consejo Superior.

“Resulta —dice el documento— de un proceso de trabajo consensuado entre todos los actores de la comunidad universitaria y tiene como origen la adhesión al Protocolo Marco Nacional aprobada por el Consejo Superior de la Universidad”.

En el informe mensual que el rector realiza ante el cuerpo colegiado, Guillermo Tamarit se refirió a la evaluación que está haciendo la Universidad sobre el curso de las actividades del primer semestre: “Si bien puede considerarse que la respuesta institucional ante la emergencia fue muy buena, ésta puede ser mejorada. Queremos analizar con todos los claustros cómo se desarrolló y qué inconvenientes existieron”.

Tamarit también habló sobre el debate del Congreso de la Nación en torno al presupuesto: “Como saben no hay presupuesto, sino que hay una prorroga del presupuesto anterior. Esperamos que esta ampliación solicitada pueda dar respuesta a todos los compromisos que se tomaron”.

La máxima autoridad de la UNNOBA también manifestó su preocupación en relación al impacto que tiene la desigualdad digital en el proceso educativo. “En Argentina —plantea el rector— el 57% los hogares tienen conectividad, o sea que hay al menos un 40% que no lo tienen. En el nivel secundario, de acuerdo a las mediciones nacionales, mientras que el 106% tiene conectividad en Buenos Aires, es decir que allí hay mas conexiones que hogares, en Formosa llega apenas al 30%. Son datos que sintetizan la inequidad y que reflejan la falacia de creer que resolvemos el problema de la formación con los espacios virtuales”.

“En el decil de mayores ingresos, el 99% de los hogares está conectado, y en el decil de menores ingresos, apenas el 35% está conectado. Entonces, no hay que hacer muchas cuentas para entender que los que mayores dificultades tenían antes del inicio de la cuarentena, están en peores condiciones”, añadió Tamarit.