Un menor de edad se encuentra en estado crítico tras ser golpeado por una patota
- Publicado el 29/01/2020
Nadie sale del asombro de lo sucedido con el asesinato de Fernando Báez Sosa y sin embargo los hechos de violencia no dan respiro. Ésta vez, un joven de 15 años fue golpeado brutalmente por siete personas, de entre 17 y 35 años y se encuentra en grave estado de salud.
El hecho ocurrió en Wilde, durante un partido de fútbol que jugaba Joel, la víctima, con sus amigos frente a un grupo de jóvenes en la plaza de su barrio. Hoy se encuentra internado en en la sala de terapia intensiva del Sanatorio Güemes de la ciudad de Buenos Aires tras sufrir una fuerte golpiza con palos, botellas, piedras, piñas y patadas. Como consecuencia, la familia confirmó la pérdida de masa encefálica, un ojo y un oído.
“Un pibito de 10 años que estaba con Joel le sacó la visera a uno de los otros pibes como jugando y se fue corriendo, entonces se enojaron, se fueron y dijeron que iban a volver”, declaró la novia de la víctima. Y así sucedió, horas más tarde, ya en la madrugada del domingo, al menos siete de ellos volvieron al lugar armados con palos, botellas y piedras y comenzaron a perseguir a Joel hasta alcanzarlo mientras que su novia y dos de sus amigos lograron escapar.
Mientras tanto Vanina, la tía de Joel dijo que lo habían dejado tirado en la puerta de su casa: “Le salía sangre del oído izquierdo como si fuera una fuente. También sangraba por la nariz y por la boca y no podía hablar; balbuceaba. Lo dejaron casi muerto en la calle. Está muy mal. Estamos esperando un milagro. Tiene múltiples lesiones a nivel cerebral, respiración asistida, está con tubos y cables por todos lados. Lo indujeron a un coma porque está gravísimo".
Si bien la familia de la víctima aseguró que siete personas participaron del ataque, el ministerio de Seguridad bonaerense confirmó que por ahora solo hay un aprehendido. Se trata de un chico de 17 años. "Quiero pedir Justicia por mi hijo; por cómo lo dejaron. Que esta gente pague, porque lo hicieron con alevosía. Fue una paliza brutal y lo podrían haber matado", dijo Jésica, su mamá,.
La causa está caratulada como "tentativa de homicidio en concurso real con premeditación" e interviene el Juzgado de Responsabilidad Penal Juvenil número 6 a cargo de Daniel Collado, del Departamento de Judicial de Lomas de Zamora.