Se trasladaron a distintas provincias más de 7 toneladas de insumos críticos

  • Publicado el 09/05/2020

En las últimas horas por un avión Hércules recientemente modernizado de la Fuerza Aérea en un vuelo de doce horas que recorrió cerca de seis mil kilómetros, se distribuyeron más de siete toneladas de insumos críticos para asistir a los sistemas sanitarios de Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego. Este vuelo permite trasladar grandes cantidades de carga y operar en pistas no preparadas con bastante autonomía de los servicios de tierra.

El jefe de la Ia Brigada Aérea, Comodoro Gabriel Cappabianca, manifestó que la parte visible de esto son los aviones que despegan y aterrizan, pero detrás están los equipos del sistema de carga, de apoyo logístico y el sistema de mantenimiento. "Llevamos hechos cerca de una docena de vuelos de distribución de insumos sanitarios críticos y otros 24 vuelos en los que repatriamos cerca de 1.400 personas varadas en el exterior desde que comenzó la pandemia", explicó. 

El Hércules aterrizó en el Aeropuerto Internacional Almirante A. Zar de la localidad chubutense de Trelew, donde lo esperaba un equipo del ministerio de Salud provincial que recibió 225 cajas con 10 paquetes de cien pares de guantes cada una, 15 kits médicos que incluyen 60 juegos de camisolines, barbijos y antiparras cada uno, 4 respiradores y un kit refrigerado para testeo de coronavirus con insumos para mil pruebas.

Alrededor de las 16.30, el Hércules llegó a la Base Aérea Militar Río Gallegos, donde el personal de Dinesa entregó a las autoridades sanitarias de Santa Cruz otras 225 cajas con 10 paquetes de cien pares de guantes cada una, 6 respiradores y 34 kits médicos que incluyen 60 juegos de camisolines, barbijos y antiparras cada uno.

A las 18 hora, el Hércules aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Malvinas Argentinas de la ciudad fueguina de Ushuaia, donde entregó 350 cajas con 10 paquetes de cien pares de guantes cada una, 10 kits médicos que incluyen 60 juegos de camisolines, barbijos y antiparras cada uno, 6 respiradores, un kit refrigerado para testeo de coronavirus con insumos para mil pruebas y cinco pallets de insumos sanitarios.

El avión empleado para este vuelo fue el C-130 Hércules matriculado como TC-66 desde su arribo al país en 1972, y que desde que salió este miércoles de un completo proceso de modernización en la Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA) luce el nombre de “Polo Sur”, en homenaje a la misión que esa misma aeronave cumplió en 1973 al unir Argentina con Nueva Zelanda inaugurando una ruta aérea sobre el extremo sur del planeta.