Ni leyenda, diosa o caña con ruda: un recorrido por la tradición de la Pachamama

  • Publicado el 01/08/2020

Aunque en la Argentina se popularizó que el primero de agosto se bebe caña con ruda casi como un amuleto personal, en realidad, el inicio del mes de la Pachamama remite al respeto absoluto a la Madre Tierra en un sentido ambiental y de convivencia.

También se trata de conciencia personal y colectiva porque la búsqueda de equilibrio en la relación con la naturaleza y con los demás seres humanos es la constante en la vida de los pueblos indígenas que ocupan el noroeste argentino y valles y montañas de Bolivia, Perú, Colombia y Ecuador, principalmente.

La caña con ruda por otra parte deriva de una tradición guaranítica asociada, efectivamente a un remedio para contrarrestar enfermedades pero en sí, no tiene que ver con el sentido profundo de honrar a la tierra que "ofrece" todo a sus hijos y a la que, pide el ritual, hay que conocer y reconocer.

Muchos traducen pachamama como "diosa" de la tierra, "deidad" de la fertilidad o de las cosechas o creen que se trata de una leyenda pero esa interpretación empobrece y por lo tanto desvirtúa el significado de la relación que los "runas" (seres humanos) buscan con la tierra o el territorio donde las comunidades están asentadas.

Entonces, la Pachamama no es una leyenda ni una creencia sino un ser vivo, una entidad, es el planeta en el que vivimos que tiene derechos como se lo reconocen las constituciones de dos Estados: la República de Ecuador (2008) y el Plurinacional de Bolivia (2009).

Ecuador dedicó el capitulo séptimo de su nueva constitución a los "Derechos de la Naturaleza" y en su artículo 71 señala: "La naturaleza o Pacha Mama, donde se reproduce y realiza la vida, tiene derecho a que se respete integralmente su existencia y el mantenimiento y regeneración de sus ciclos vitales, estructura, funciones y procesos evolutivos. Toda persona, comunidad, pueblo o nacionalidad podrá exigir a la autoridad pública el cumplimiento de los derechos de la naturaleza".

Desde la Argentina, salió un gran aporte para este debate porque el actual juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH) Eugenio Zaffaroni en su libro "La pachamama y el humano", analiza la evolución del pensamiento filosófico y jurídico respecto de la naturaleza o como dice la tradición judeocristiana "la creación".

 

Via Telam