Carlos Casares || Por la caída de las ventas piden la suspensión de las tasas municipales

La cámara de comercio de Carlos Casares se sumó a la lista de ciudades bonaerenses que les reclaman asistencia a sus Municipios. “Resulta imposible afrontar los pagos en un contexto en el que las ventas no repuntan”, fundamentaron.

La cámara de comercio de Carlos Casares elevó un pedido al Municipio para considerar la suspensión de la tasa de Seguridad e Higiene o alguna medida de reducción, como la que se había tomado el año anterior, ante el impacto negativo de la crisis en las ventas de los comerciantes. El reclamo también fue realizado por Pymes de Mar del Plata.
Tal como había ocurrido en el 2018, la cámara de comercio de Carlos Casares volvió a solicitarle al Municipio algún beneficio en las tasas para poder afrontar la caída en las ventas, la cual, según han señalado, se acrecienta en medio de la crisis.

De esa forma, desde la entidad le elevaron un pedido al Municipio para considerar la suspensión de la tasa de Seguridad e Higiene, la cual, desde la finalización de la rebaja del 50% concedida el año anterior, y dado el aumento del corriente año del 35%, resulta imposible afrontarla en un contexto en el que las ventas no repuntan.
Otra de las complicaciones que han mencionado los representantes de la cámara es la competencia de las ventas electrónicas por internet, lo que deja en desventaja a los comercios más pequeños de la ciudad.

En ese marco, desde el Municipio recibieron el pedido y adelantaron que, a pesar de las dificultades que la administración también afronta por distintos frentes, al igual que en el 2018 se tratará de buscar un paliativo para ayudar a los comerciantes.
En tanto, desde la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme) de Mar del Plata expresaron su preocupación por la decisión de Gobierno, ya que, de acuerdo con lo que afirman, “en un marco en el que las micropymes están atravesando una situación de extrema gravedad, acorraladas por la caída de las ventas, los abrumadores importes de las tarifas, el aumento de los costos internos, elevadas tasas de interés y agobio tributario, esto es una estocada más a la delicada situación del sector”. “Pasar del 3% al 4,5% es de una lógica mercantilista, que sigue el derrotero de la timba financiera. No hacen más que poner un salvavidas de plomo”, afirmó al respecto Gustavo Casciotti, el titular de la Apyme de Mar del Plata.