Adultos mayores, los "tiktokers" que nadie esperaba, vienen a decir lo suyo y ganan popularidad

  • Publicado el 14/08/2022

Cada vez más son las personas mayores que no sólo se animan a la red social TikTok sino que lo usan para cuestionar estereotipos sobre la vejez o para reírse de los equívocos que generan los prejuicios "viejistas"; todo con cientos de miles de seguidores, la mayoría jóvenes y adolescentes que claman "adóptame".

"Le quiero tirar 'hate' a esta vieja pero me da ternura", es el comentario que le habían hecho en TikTok a Mirta Bernardotti (79) -la "abuela hippie"- y que ella contestó en uno de sus videos más populares, de 150.600 likes.

"A mí no me tienen que tirar 'hates', al que se le ocurren esas cosas es a mi nieto, al tarado ese que ven ahí, que se cree inmune porque pertenece a la comunidad LGGT…¿cómo es?, LGBTTT", dice mientras señala a su cómplice en esta red social, Demian de 23 años, sorprendido de espaldas mientras se prepara un café.

En otro video aparece con expresión quejumbrosa y un cartel sobreimpreso que advierte que así se ve "cuando me patiné toda mi jubilación en el casino" mientras suena una canción que dice "ojalá pudiera volver el tiempo"

Tita Zacharías (66 años), en tanto, cosechó más de 57.500 likes con un video que la muestra con su nieto Joaquín (21), haciendo una coreografía que es tendencia, para festejar que había llegado a los 600.000 seguidores.

Otro de los videos con más vistas de "la abuela Tita", es un "reto" a las personas tatuadas de TikTok al que ella responde mostrando los nombres de sus cinco nietos grabados en su brazo izquierdo como "tatuaje más grande" y reconoce "como el más doloroso" el que está detrás de sus cejas perfectas: "como no tenía cejas, me las tatué", dice el posteo.

Creada en 2017, la red social TikTok que explotó en audiencia durante la pandemia y acumula 3.000 millones de descargas en todo el mundo. Ocho de cada diez usuarios es menor de 25 años.

Los adultos mayores son una minoría: según el portal Statista de estadísticas en línea, sólo el 0,36% de quienes producen contenido en esa red social son mayores de 55 años.

A pesar de cultivar un humor muy diferente, la salteña Tita y la bonaerense Mirta tienen muchas cosas en común: ambas son viudas, abuelas presentes, están estudiando, les encanta bailar, viajan siempre que pueden y tienen el cabello teñido de violeta.

"Durante la pandemia: un día vino mi nieto y me dijo 'abuela, ¿te animás a hacer un TikTok?'. Yo le dije que sí de una y después le pregunté '¿u qué es?' Los primeros fueron de experimentación, después lo fuimos mejorando gracias a él. ¡Y también a mí que soy una cara rota!", contó Mirta a Télam desde Libertad, partido bonaerense de Merlo.

Sus posteos, rebosantes de incorrección política y malas palabras, hacen recordar a la inefable Herminia, la mamá de Eugenio y Sebastián "Culini" Weinbaum del programa MDQ.

En cambio, Tita ya había sido reconocida como "creadora de contenido" por TikTok cuando apareció el coronavirus.

"Yo llegué de casualidad, en un mal momento de mi vida, cuando una sobrina me pidió que hagamos un video en 2018. Después continué porque me sirvió de compañía, de terapia y me ayudó bastante con el duelo por la muerte de mi marido", contó a Télam Tita.

Cada una con su estilo, se muestran activas, seguras de sí mismas, libres, independientes, divertidas, empoderadas, con mucha vida social y hablando con los mismos códigos de sus seguidores veinteañeros. Nada más lejos del estereotipo que remite a una vejez en soledad, de enclaustramiento, depresión, escasez de recursos y de un tiempo monopolizado por la enfermedad o por el trabajo impago de cuidar nietos.

"Finalmente la edad es sólo un número, una limitación que existe dentro de nuestra cabeza porque mientras estemos sanos y nuestro cuerpo nos lo permita, podemos hacer deporte, bailar, salir, pasear, vestirnos como nos dé da la gana -como hago yo-", contó Tita que para la nota eligió vestir un suéter fucsia, bufanda verde y sobretodo amarillo mostaza.

De hecho, uno de sus últimos videos la muestran levantando 15 kilos con sus cuádriceps o estudiando a las tres de la madrugada para su primer final universitario.

En tanto, entre los cortos más populares de Mirta se cuentan aquellos en que enseña "cómo negarte de forma cordial" cuando "te piden que cuides a tus nietos" o "te piden plata", conversaciones que recomienda sellar con tajantes negativas, como "chupala".

"Si te traen los chicos por una emergencia está bien y yo también yo lo hice, pero si es para irse de joda todos los días -como hacen muchos- yo les digo '¡andate a pasear!'", cuenta Mirta, quien pudo hacer el secundario recién en 2015 porque sus padres no la mandaron al colegio por ser mujer.

A las dos les tocó lidiar con "haters" que les cuestionan duramente su presencia en la red social o ponen en duda sus recursos para poder comprarse o usar un Smartphone de última generación.

"Al principio me decían '¿y este dinosaurio de dónde salió?', pero eso ya pasó. Creo que los chicos, sobre todo menores de 15 años, se sentían ofendidos porque una abuela estaba ocupando 'un lugar que no les correspondía' porque si bien no hay límite de edad, la gente mayor antes no se animaba o le parecía una ridiculez. Y los chicos se veían como invadidos y me veían como una competencia", dijo Tita.

A Mirta a veces la tratan de "pasa de uva", preguntan por "el telégrafo de la vieja"; pero ella siempre se las ingenia para devolver el golpe con humor.

"Obvio mi celular lo compré con mi jubilación, pa, para eso está. ¿O qué, vos a tu sueldo no lo gastás, lo tenés de adorno? ¡Topo!", dice en un posteo de repuesta.

Además de los nietos, en ambos perfiles tienen un papel protagónico los esposos fallecidos, que aparecen en viejas fotos de juventud o en anécdotas románticas. Siempre más políticamente incorrecta, Mirta no se priva de culpar al difunto de las cosas que se caen cuando está sola en su casa o de mostrar el jarrón donde guarda sus cenizas.

Otros tiktokers de la tercera edad muy populares son "Abuelo Carlos" (97.600 seguidores), "Abuelo de TikTok" (730.000), "El abuelo Domingo" (1,4 millones), "Abuela Josua" (3,9 millones) y "Abuela XL" (522.000).

"Me encanta, ojalá todas las abuelas se dieran a sí mismas el mismo lugar que tenían antes, de jóvenes. A mí no me vergüenza nada, me encanta y me pone feliz que se diviertan con lo que hago, que me reconozcan por la calle y que quieran sacarse fotos conmigo", concluyó Mirta.

 

 

Nota Telam -María Alicia Alvado