“Santo Padre, ¡qué gusto al verlo!” El Presidente de Nación visitó por primera vez al Papa
- Publicado el 31/01/2020
Alberto Fernández y el Papa Francisco se reunieron en el Vaticano, como estaba previsto; el Jefe de Estado desarrolló una reunión en la biblioteca del Palacio Pontificio y según trascendió, fue una reunión cordial en la que ambos se mostraron distendidos. La misma se extendió durante 44 minutos.
“Santo Padre, ¡Qué gusto al verlo!”, saludó Fernandez, “Bienvenido”, retribuyó el Papa. Así fue el encuentro, cuando el primer mandatario ingresó a la Sala del Troneto del Vaticano. La reunión fue cordial y a solas, la cual se prolongó el doble de tiempo que el Papa le dedicó a Mauricio Macri, el 27 de febrero de 2016, cuando el entonces presidente lo visitó por primera vez.
Luego de la reunión, se realizaron intercambios de obsequios, como es habitual en este tipo de encuentros, de este momento participó también la Primera Dama, Fabiola Yañez, y parte de la comitiva que integró la delegación . El Presidente Argentino eligió un telar elaborado por la Granja Andar, de Moreno, un busto del Negro Manuel, y un libro sobre cafés de Buenos Aires. Francisco, por su parte, le regaló a Fernández sus cinco escritos como Papa y le firmó la exhortación “Christus Vivit”, y el mensaje de la Jornada Mundial de la Paz de este año. "Este lo elegí yo para que sean mensajeros de la paz", expresó el Santo Padre.
“Ella trabaja con Scholas", planteó el pontífice cuando el presidente le presentó a la Primera Dama, recordando la visita que Yañez había hecho a las oficinas de la fundación pontificia en Roma el pasado 13 de diciembre. Después saludó uno por uno a los miembros de la delegación: bromeó con el Secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz ("haciendo travesuras", le dijo); habló con el canciller Felipe Solá sobre "cuántos años" que no se veían; abrazó al secretario de Culto, Guillermo Olivieri, y saludó entre sonrisas al secretario de Comunicación y Prensa, Juan Pablo Biondi, y a la ministra de Justicia ,Marcela Losardo.
Fuentes: Telam, Página 12