Se cumplió un año de la detención de Pity Álvarez

  • Publicado el 19/07/2019

Triste aniversario para Cristian “Pity” Álvarez: el sábado 13 de julio se se cumplió un año desde que ingresó al penal de Ezeiza, acusado del crimen de Cristian Maximiliano Díaz, a quien mató a balazos. El músico permanece alojado en el Programa Interministerial de Salud Mental Argentina (Prisma), destinado a los reclusos con problemas psiquiátricos y está permanentemente monitoreado a la espera del juicio que tendría lugar en septiembre u octubre.

Sus primeros meses en la cárcel los pasó completamente sedado, deprimido y con crisis de abstinencia. Su mamá temía que se suicidara y hasta deslizó que su hijo tenía “un plan” para quitarse la vida. Pero luego las cosas mejoraron, Pity engordó 20 kilos, y es visitado frecuentemente por su mamá, su hija Blondie de 6 años, y su novia actual.

 

También el padre César Scicchitano Tagle, conocido como “el cura rockero”, hoy su mejor amigo. Dos veces por semana el ex "Viejas Locas" da clases de canto, y armó un coro. Escribe cuentos e historias.

En Prisma estuvo con el baterista de Callejeros Eduardo Vázquez (condenado a perpetua por el femicidio de su pareja, Wanda Taddei, a la que quemó viva en 2010), quien manejaba un taller de percusión en la cárcel, en el que “Pity” se había anotado para participar.

Pero cuando trascendió en la prensa que habían tocado juntos, decidió borrarse. Según el informe del Cuerpo Médico Forense, Álvarez es poliadicto y sufre trastorno de personalidad. Pero, al mismo tiempo, ratificó que era consciente de sus actos cuando mató a Díaz. Ahora, en pocas semanas se definirá su futuro.

Fuente: Diario Show