Hoy cumpliría 60 años Alejandro "Bocha" Sokol
- Publicado el 30/01/2020
Hace 60 años nacía en Hurlingham, Alejandro Sokol, cantante y frontman de Las Pelotas y miembro de la primera formación de Sumo. Un artista que eludió todas las etiquetas posibles, incluso las de rebelde rockstar o las de hombre de barrio, a las que cualquiera estaría tentado de sucumbir.
En casi 30 años de carrera - con algunas interrupciones- lo mostraron como un hombre genuino, frontal y directo, que disfrutaba de los shows en vivos y que desplegaba su energía de la misma manera tanto en conciertos pequeños como en grandes escenarios. Podía actuar tanto en un bar o en el Monumental, como cuando telonearon a los Stones con Las Pelotas.
Era un personalidad singular, con rasgos marginales pero con elegancia y precisión a la hora del decir; con “códigos de barrio” sin caer en la banalidad; y exento de todo glamour, sin renunciar por eso a portar un halo especial al plantarse sobre el escenario.
Amante de David Bowie, este oriundo de la localidad bonaerense de aceptó en los primeros años de los '80 la invitación de su vecino Daffunchio de sumarse a un grupo que estaba formando junto a una pareja llegada de Inglaterra, Luca Prodan y Stephanie Nuttal, que había sido albergada en las sierras cordobesas por su cuñado Timmy McKern.
Así pasó a ser el bajista de Sumo, en su primera época, para luego ceder ese lugar a Diego Arnedo y ocuparse de la batería, cuando Nuttal regresó a Gran Bretaña, en medio del conflicto bélico por las Islas Malvinas, en 1982.
Su paso por Sumo quedó registrado en el disco “Corpiños en la madrugada”, un álbum no oficial que solía venderse en formato de cassette en los shows del grupo y que, años más tarde, cuando el grupo alcanzó renombre, se reeditó en CD. Abandonó la banda en un intento por sobrevivir a los excesos en una actitud extrema que incluyó abrazar la religión mormona. De aquellos tiempos, Sokol recordaba que “Sumo era un infierno (…) Nos dábamos con todo; si no me iba, me moría. Pasé por una situación difícil en un show, un susto que fue determinante. (...) Pero quedó todo bien. Me acuerdo que una de las últimas veces que lo vi a Luca, me puso la mano en el hombro y me dijo: ‘Alejandro, vos sos un Sumo’’.
Tras la muerte de Luca Prodan, en 1987, y la consecuente disolución de Sumo, Sokol se reencontró con Daffunchio para formar Las Pelotas, que también incluía en su primera formación a Alberto “Supermán” Troglio, baterista de la disuelta banda.
Sokol logró imprimirle a Las Pelotas su impronta, un punto difuso entre lo festivo y lo desgarrador, la alegría y la furia marginal; siempre en plan catártico. Tras varios años de carrera e hitos y la reunión de Sumo durante el Quilmes Rock 2007, en la que hizo las veces de voz principal, varias disidencias con Daffunchio provocaron el alejamiento de Sokol de la banda.
El siguiente proyecto del cantante iba a ser El Vuelto, un grupo que compartiría con su hijo Ismael, y que tendría una corta vida a raíz de su repentina muerte el 12 de enero de 2009.