Productores de 9 de julio increparon a funcionarios por caminos rurales anegados: “váyanse a la mierda”
- Publicado el 30/09/2025
Un grupo de productores agropecuarios y transportistas de la localidad de Carlos María Naón, junto a vecinos de otras localidades como La Niña, French y Morea, protagonizó ayer un fuerte reclamo frente al Palacio Municipal de 9 de Julio.
Quemaron gomas en el ingreso y exigieron respuestas urgentes por el estado crítico de los caminos rurales anegados, que impiden el acceso a los campos y la salida de la producción hacia los mercados.
La protesta, que se extendió durante toda la mañana, derivó en cruces tensos con funcionarios locales. En un momento, uno de los productores logró ingresar al despacho del Secretario de Gobierno, Federico Aranda, e increpó a los funcionarios con frases que reflejaron el hartazgo del sector rural: "Váyanse a la mierda, con todo respeto se los pido", "Ya les quedó grande la intendencia" y “Basta carajo, no jueguen con los seres humanos”, fueron algunas de las expresiones que resonaron en el municipio.
Los productores reclaman obras de reparación inmediata, trabajos de drenaje y financiamiento que permitan destrabar la producción, que hoy permanece atrapada en los silos debido a los caminos intransitables tras las intensas lluvias y la crisis hídrica que afecta a gran parte del partido de 9 de Julio. Según relevamientos de entidades agropecuarias, el 98% de los caminos rurales están en mal estado, y el 40% directamente imposibles de transitar.
Ante la ausencia y presunta falta de acción de la intendenta María José Gentile (PRO) y funcionarios, los productores anunciaron que sostendrán las medidas de fuerza hasta que se atiendan sus demandas. Además, presentaron una denuncia penal contra la intendenta y el jefe comunal de Carlos Casares, Daniel Stadnik, por inacción en la emergencia hídrica que afecta a la región.
La situación de los caminos rurales en 9 de Julio ya motivó la prórroga de la emergencia agropecuaria por parte del gobernador Axel Kicillof, otorgando beneficios impositivos a los productores afectados, aunque la crisis persiste con impacto directo en la economía local y en la campaña agrícola.
Esta protesta refleja la profunda preocupación y el cansancio del sector agropecuario ante una problemática estructural que, agravada por las condiciones climáticas, pone en jaque la viabilidad productiva y el desarrollo rural del partido.